Llega la tienda de Pono y es muy cara… o no

¿Recordáis Pono? Sí, hablamos del reproductor de altísima calidad impulsado por el músico canadiense Neil Young, y avalado por un buen grupo de personalidades de la cultura norteamericana. Con aquel dispositivo, Young batió todos los records de financiación en Kickstarter el pasado año. Ahora se ha estrenado la PonoMusic Store,

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¿Recordáis Pono? Sí, hablamos del reproductor de altísima calidad impulsado por el músico canadiense Neil Young, y avalado por un buen grupo de personalidades de la cultura norteamericana. Con aquel dispositivo, Young batió todos los records de financiación en Kickstarter el pasado año.

Ahora se ha estrenado la PonoMusic Store, la página web donde se puede comprar música digital de máxima resolución. En el momento de escribir esto, se avisa que está en Beta todavía.

Lo que más sorprende es, desde luego, el precio. Los discos se venden bastante por encima de lo que valen en otras plataformas.

¿Son caros los discos de Pono? Bueno, eso depende de con qué lo compares.

Como bien dicen en Gizmodo, es absurdo comprar el Third de Portishead a baja calidad por más precio que en iTunes. Nada que objetar a eso, y esperamos que en la tienda de Pono se den cuenta pronto de esa extraña decisión que han tomado.

Pero en el caso de los discos a buena calidad, el hecho de que su precio sea superior no debería chocar a nadie. Al fin y al cabo, lo mismo sucede en cualquier otra rama de la industria. Cuanto más lujoso es el servicio, más vale.

Y es que la calidad del sonido parece lo más importante para Pono, hasta el punto de que en la información de cada álbum se especifica de manera visible la calidad de las canciones. Un dato que es difícil de encontrar en otros servicios.

Tampoco le vemos sentido a la crítica de que algunos discos se deban comprar enteros (otros sí se pueden comprar por canciones). En algunos casos se podría conseguir disfrutar de un fragmento suelto, en otros, no tendría ni pies ni cabeza. Muchos discos conceptuales, como The Wall de Pink Floyd o Seventh son of a seventh son de Iron Maiden, se deben entender como un todo, como una historia con un principio, un nudo y un desenlace. Igual de absurdo sería hacerse con un capítulo suelto de una novela o una escena al azar de una película.

En este punto, cada usuario debe decidir cuál es la relación que desea tener con la música: si la va a tener de fondo, si solo quiere escucharla sin profundizar a niveles casi profesionales, o si desea escuchar cada ínfimo detalle con la máxima calidad. Según indica Young, con un reproductor Pono se puede escuchar fielmente un master de grabación de un disco. Algo muy jugoso para los auténticos melómanos.

Existen posibilidades para todos los gustos, tanto en reproductores como en formatos de audio, y los precios varían en función de lo que se ofrece. No hay opciones buenas o malas, sólo diferentes, y está bien que sea así.
El mercado de la música digital está madurando. Maduremos también nosotros.